SIGUE AQUI EL CUENTO PARA PATRICIA

pero esa mañana se encontró con el rey "u", quien no estaba de humor, porque alguien le había pisado su rabito y lucía tan abajo que todo el mundo lo confundía con súbditos como la "q" o la "p". Cuando la reina "a" le preguntó ¿no soy la más linda?, al mejor estilo madrastra de Blancanieves. El rey "u" le dio un estruendoso grito UUUUUUUUU, nuestra querida y presumida reina salió espantada, llorando.
Era la primera vez que alguien la rechazaba, siempre había vivido en un ambiente confortable, rodeada de mimos y gente que parecía quererla, pero cuando ese día le vio la cara a "U" empezó a pensar. Se encerró en su habitación y no quería salir. Fueron tiempos tremebundos en el reino de Book, todas las demás letras empezaron a mezclarse como podían, y donde tenía que ir la "a" se tenía que poner cualquier otro de los reyes. Lo más cómodo es que siempre la sustituyera el rey "o" porque así la gente, con un ligero peinadito la transformaban en "a". pero el rey "o" era muy malhumorado y todo empezó a descabalarse en aquel reino donde hasta el grito del rey "u" reinaba la cordura. No sabían qué hacer. Hasta que acertó a pasar por allí una princesa de otro reino: Patricia, se llamaba esta hermosísima princesa.
Cuando quiso escribir su nombre, empezó con la P, después quiso escribir la A, pero no podía, en su lugar le salía una O, siguió escribiendo T,R,I.C.I....y cuando quiso escribir otra A, volvió a tener problemas con esa O
P-O-T-R-I-C-I-O leyó la princesa frunciendo el ceño.
Al instante pidió una reunión de letras del reino letrado y exigió una explicación.
Cuando se enteró de lo ocurrido, ella personalmente fue a hablar con la letra "A" que seguía encerrada en su cuarto sin querer salir.
Patricia con su dulce voz le pidió que le abriese:
.- Tengo unos cuantos vestidos y peinados nuevos para que nos probemos juntas. Le dijo la princesita.
Claro la "A" no es que había cambiado tanto:
.-Bueno, te abro si entras tu solita, le contestó.
Así fue como Patricia se coló en el cuarto de "A". Cómo era una nena muy inteligente, en seguida se puso a jugar con ella, a hacerle peinados, a probarle trajes y la "A" entraba poco a poco en confianza con esta princesita del planeta hermano.
Fue la letra solita la que empezó a contarle el altercado que tuvo con la "U" y por qué estaba tan enojada.
Patricia se sonrió y le preguntó con toda la belleza que pueda existir en un ser vivo:
.-Dime A, ¿Por qué quieres ser -la más bella-?
.-No sé ... dijo A, porque me gusta ser linda, porque...porque.... porque quiero que todos me quieran.
.-Ahá. Dijo Patricia.¿que te quieran o que te miren?
.-las dos cosas, dijo "A" caprichosa.
Entonces Patricia empezó a explicarle cómo funcionaban las cosas en su mundo ideal.
.-Todos formamos parte,- le dijo- y la armonía y sentirnos bien convencidos y a gusto con las cosas que hacemos, es lo que nos convierte en seres radiantes.
La "A" la miró bien y se dio cuenta que era cierto. Patricia estaba radiante.
Continuaba diciendo que cuando alguien no sabe cual es su lugar, todo entra en disarmonía y ahí le mostró el nombre que había logrado armar mientras ella estaba enojada.
P-O-T-R-I-C-I-O, acertó a leer "A" y a las dos les dio un ataque de risa.
La letra "A" aprendió esa lección.
Patricia le hizo una trenza con una extensión tan larga que pasaba por arriba de su cabeza, @ y volvía para abajo.
.-Mira, te regalo este peinado especial, desde ahora te conoceran también por el nombre de arroba y te aseguro que todo el mundo te va a adorar. Espero que no te canses de ser tan re-querida y que sigamos jugando por toda la eternidad.